jueves, abril 05, 2007

Esos locos bajitos

No se me ha ocurrido un título mejor para esta entrada. Además, también me permite poner uno de esos enlaces a letras de canciones a los que tan aficionado soy. Ésta, evidentemente es española pero también hay por ahí por el blog enlaces a otras canciones escritas o al menos cantadas en la lengua de Shakespeare. Bueno, no me enrollo más, la letra completa se puede ver aquí:
http://www.musikeiro.com.ar/letras.php?id=303

Centrándonos un poco ya en el tema de la entrada, los locos bajitos son algo de lo que hay que hablar, en particular con mis parejas o candidatas. En algunos casos no ha habido mucho lugar a discusiones, dudas ni sorpresas. Por nuestra forma de ser, dos tres hijos, dos con más probabilidad, es el número correcto (esto ya dice a las claras que en caso de todo saliera bien, se tendrían hijos). En cambio, ahora la situación es más interesante que nunca. Alguien a quien no le importaría no tenerlos con alguien que lo considera algo realmente necesario para poder realizarse. Alguien que los tendría si su pareja los desea fervientemente con alguien que normalmente no discute las decisiones de su pareja. Y tan interesante es que llegan las bromas ... "Mira ese niño dando el espectáculo, ¿De verdad que quieres tener uno?", "Mira qué preciosidad tan dormidito ... ¿Cómo puedes decir que no quieres tener uno?" :-D. Quizás no sean ésas exactamente las conversaciones, pero podrían serlo ;-).

Por otro lado, hoy me dice ... "Tengo una mala noticia que darte, lamentablemente no vas a poder ser padre este mes". Y claro, tras afligirme momentáneamente, intento seguir adelante en la vida pensando que todavía nos estamos conociendo, que no estamos casados, que no tenemos casa común de nuestros sueños y que en realidad salvo fuerte espaldarazo a la Divina Concepción o ingenio bio-tecnológico, lo contrario hubiera sido complicado. De hecho, se trata de una magnífica noticia ya que así no tengo que preguntarle quién es el padre de la criatura :-P.

Además, también tiene la desfachatez de decirme que ambos somos jóvenes para ser padres, como si el tres no hubiera asomado ya en las decenas de la edad marcada por mi D.N.I. Es más, a veces pienso que como aquella carta que supuso un escándalo cuando se la sacó de contexto, su estrategia está basada en la dilación más que en el rechazo. Total, cuanto más viejo sea yo, más vieja será ella también jejeje.

Bromas aparte, se trata sin duda de una conversación que habrá que mantener de forma seria o casi más probablemente, quizás no haya que mantener pues llegado el caso todo estará más que claro. Pero lo que es seguro es que todavía no es el momento para mantenerla, por ahora basta con que mantengamos el ritmo, un ritmo con el que aparentemente los dos estamos muy a gusto, aunque sin descuidar otros aspectos importantes como pueda ser aquello a lo que ella se dedique o mi propio sueño :-D.

Ahhh, casi se me olvidaba algo tan importante como lo que hasta ahora llevo escrito. Esta entrada tenía dos misiones fundamentales, lo anterior que viene a suponer el 50% y lo restante que cifraremos en otro tanto. Pues bien, resulta que más de uno (en este caso de una) me ha dicho ... "¿Pero todo eso escribes?" a lo que yo respondo que sí, y aclaro además que ahora estoy en baja forma. Pero no puedo sino darles la razón porque a mí también me resulta mucho más difícil leer o releer todo lo escrito que realmente escribirlo. Alguna vez recuerdo haber tirado hacia atrás mirando cosas escritas hace tiempo y tras pasar varios minutos leyendo una entrada (o una sucesión de ellas), he pensado que realmente escribo demasiado.

Sin embargo, es lo que hay; no pienso en los posibles lectores cuando escribo sino en que quede guardado en algún lado para, llegado el día de mañana, poder releer y ver cómo pensaba. Ya por lo pronto lo he conseguido varias veces al poder comparar situaciones actuales con otras parecidas de otros años. La prueba más cercana, lo escrito sobre la Semana Santa.

En este sentido, se puede decir que sólo pienso en que esté ahí para cuando yo pueda querer revisarlo, no pienso en que me vaya a resultar fácil revisarlo. Entre otras cosas es un pelín tonto pensar que iba a mejorar mucho la cosa si escribiera la mitad. Por ejemplo, en el blog ya archivado esto hubiera supuesto pasar de 172 páginas a "sólo" 86. Puestos a leer como que tampoco es mucha la diferencia. Pero hoy, con lo de las bromas de los hijos y tal, he sido realmente consciente de que quizás no sea yo el único que lo lea. ¿Y si lo leen mis hijos, esos dos o tres que voy a tener?. Podría resultar una experiencia curiosa sentarse con los hijos propios y mientras ojeas algunas fotos, relees las cosas que pensabas sobre esto, sobre aquello o sobre lo otro. En fin, eso está todavía más en el aire que los propios hijos pero por si acaso estáis leyendo esto, hijos míos ... sabed que vuestro padre os quiere ;-).

Un saludo, Domingo.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

En fin Domingo, me has roto el corazón, siempre pensé que secretamente escribias para mi... pero bueno, si resulta que lo haces en favor de tus hijos, te perdono... Bueno, los que te leemos, habitualmente como yo en este tu blog, o esporadicamente como los que te han leido en alguna que otra revista en la que has publicado (revistas de cafetería y esas cosas), conocemos bien tu estilo de escritura, y, aunque esta entrada es un poco enrevesada, normalmente escribes de una forma amena para leer (aunque abuses un poco de tirar de diccionario)....

Besitos

Domingo dijo...

Giovanni ... como ya hay quien te ha dado la razón en privado, no voy a ser yo quien te la quite en público. Sólo comentaré que aunque alguna vez tiro de diccionario, la mayor parte de las veces me limito a escribir lo que en ese momento quiero decir, incluyendo la palabra que mejor expresa a mi juicio lo que quiero decir.

A continuación, una nueva comprobación de que, como casi siempre, llevas razón en tus comentarios ;-).

La prueba de ello la tuve cuando improvisando (se trataba precisamente de improvisar) en uno de los cursos a los que de vez en cuando asistimos, dije algo así como ... "y ahora intentaremos explicar sucintamente cómo se hace esto".

Según parece, la "profe" quedó en un claro fuera de juego y no pudo reprimir un comentario diciendo algo así como que era una palabra que conocía pero que nunca había usado o que simplemente estaba en su vocabulario de los domingos. Eso mismo me han dicho después, además no hace mucho, y por poco me gano una admonición por ello ;-).

Un saludo, Domingo.

Anónimo dijo...

No te preocupes, Domingo, en una época en la que está casi mal visto utilizar mas de 1000 palabras en cualquier idioma, yo estoy encantado de tener que tirar de diccionario de vez en cuando...

Por cierto, a mi una vez hablando con Francis, tambien le dije algo así como "tu no puedes ser su adalid" (mas o menos), y aunque él, como tú, conocía el término, me dijo que era la primera vez que oía a alguien usar la palabra...

Domingo dijo...

Giovanni, como siempre eres el adalid de los que consiguen decir las cosas de forma más sucinta que yo ;-).

Otro besito ;-).

polly darton dijo...

Está visto que el cosmopolitan es imprescindible tenerlo a mano para casos como éste...

A.C. Oliver dijo...

A mi también me gusta tu estilo de escribir, te explayes más o menos en los detalles. Personalmente, he tenido que reciclar un poco mi blog a entradas más cortas para no aburrir a mis lectores, y creeme, condensar no es facil, pero me sirve de practica para mis plane literarios del futuro

A.C.Oliver, bloggeando...