viernes, mayo 04, 2007

Subida a la Maroma 1/2

Todo empieza el sábado a mitad de la tarde. Recibo una llamada para proponerme hacer algo de senderismo al día siguiente. El autor de la llamada no es otro más que Jesús al que hacía ya un tiempo que no veía. De hecho la última vez que lo vi tenía también intención de subir “La Maroma” con su hermano y su padre con los que ya había hecho la ascensión al “Torrecilla”, ese pico que según los de Ronda es el más alto de Málaga :-D.

Bueno, le comento que tengo que pensármelo y tras quedar en que ya nos llamamos para ver los detalles, hablo con quien tengo que hablar para posponer nuestra cita hasta el puente del 1 de mayo y sin esfuerzo aparente ella accede :-O. ¿Será que tenía ganas de que me quitara de en medio? :-D. Bueno, va a ser que no porque quedamos para ir a comprar juntos y demostrarme una vez más que la puntualidad es un concepto británico o alemán, según gustos, poco apreciado por estos pagos :-P.

Y con éstas que de alguna forma llegamos al Decathlon donde yo tenía previsto comprar unas botas de ésas que se usan para estos menesteres una vez que los kilómetros andados previamente con ellas han conseguido que se amolden a tu pie como guante a la mano y desaparezca así la posibilidad de aparición de ampollas, rozaduras y demás sintomatología propia de los domingueros que sin preparación ninguna se aprestan a romper meses de inactividad con una actividad física más propia de un "amateur" venido a más más que de un saco de colesterol. Por cierto, es curioso, la palabra "amateur" que no viene en el diccionario de la RAE y procede del francés he intentado cambiarla por "debutante" pero ésta a su vez parece que viene del inglés y para terminar el ciclo, resulta que también tienen los franceses su "débutant" que es precisamente una de las palabras que hemos aprendido en las clases de francés :-D. Así que me ha entrado la duda de saber dónde se originaría todo, aunque el hecho de que en español esté también la palabra "principiante" y en inglés "beginner" que suenan más "castizas" me hace pensar que ambos hemos pedido prestada la palabra debutante del francés. Sí, ya lo sé, para contar la subida a la maroma no hacían falta estas alforjas, pero es lo que hay :-P.

Bueno, habíamos quedado en que me compré las botas y compré además una mochila y bastones para caminar por el campo, no en vano recordaba de la anterior vez lo importantes que eran estos dos elementos. La otra vez, por llevar calzado deportivo normal, y no arriesgar en rozaduras, me llevé algún que otro susto. Y lo del bastón pues fue simplemente la reminiscencia de cómo Ricardo, nuestro guía la vez anterior sacaba los bastones del coche y los repartía a todos menos al pobre Jesús para el que no llegó y que se tuvo que "apañar" un bastón de los de la antigua usanza. Él aprovechó la rama del árbol caído en vez de hacer leña con ella :-).

Esta vez fue otro el que tuvo que hacerse un bastón natural pero no hemos llegado hasta ahí todavía. Por lo pronto dejamos el Decathlon, llego a mi casa, preparo la mochila recién comprada (14 euros pero que sería al día siguiente la envidia de las mochilas infantiles), meto lo estrictamente necesario (lección aprendida también de la vez anterior), busco un par de instrucciones por internet que expliquen cómo llegar y a la 1 de la mañana me acuesto :-S.

Los enlaces no eran éstos, pero éstos son incluso mejores si alguien quiere hacerse una idea del sitio, la subida etc.
http://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/web/Bloques_Tematicos/Patrimonio_Natural._Uso_Y_Gestion/Espacios_Protegidos/SENDEROS/Tejeda/El_Robledal_La_Maroma.pdf
http://www.fedamon.com/revista/revista13/maroma.htm
http://www.acentorural.com/rutas/malaga/SenderoelRobledal-LaMaroma.htm

A las 6 suena el despertador, cojo las cosas, me zampo una manzana de buen tamaño y a las 6 y media empiezo la ruta y a recoger gente. Llego a por Jesús con 5 minutos de adelanto y ... él también llegaba. Vamos a por Jose, llegamos con 5 minutos de adelanto y ... él no está. Esperamos a las 7, la hora convenida, las 7 y cinco, damos un primer toque y mientras comentábamos las particularidades de los impuntuales, recibimos un mensaje que nos decía que llevaba esperándonos 5 minutos. Resultó que había salido, no nos había visto se metió de nuevo. En fin, esas cosas pasan :-D.

A la vez llega Samuel y entonces me doy cuenta de que nos va a faltar un bastón pero bueno, bastante es comprar tres como para haber comprado un cuarto por si alguien se nos incorporaba a última hora :-D. Y sobre las 7:15, partimos rumbo a la Maroma. El plan de ruta suponía que teníamos que salir a las 7, llegar a las 9 al lugar de salida, a las 13:00 a la cima, a las 17:00 abajo de nuevo y a las 19:00 de vuelta a Málaga.

Adelanto ya que el horario (aproximado ) que conseguimos fue:

07:15 Salida
09:00 Llegada a la Venta donde debíamos desayunar antes de iniciar la ascensión.
09:35 Inicio Subida.
12:50 Cima
14:00 Inicio Descenso
16:45 Fin Descenso.
18:00 Salida Venta
19:00 Llegada Málaga.

Ahora detallaremos un poco más, aunque esperemos que no mucho más pues no quiero que esto se eternice :-). Lo primero es que nos perdimos a la ida. En las dos instrucciones que habíamos sacado hablaban de la Venta Alcaicería cuando en realidad lo que había era un Hotel Caños de la Alcaicería que hace un tiempo era una venta y de hecho lo que es la cafetería es la típica venta. Esto nos hizo retrasarnos 15-20 minutos, lo suficiente para llegar a Alhama, preguntar a un amable lugareño que nos confirmó que el Hotel era la Venta y volver.

Tras desayunar en la venta un amargo zumo natural al que tuve que echar algo de azúcar (resultando la mezcla exquisita), cogimos de nuevo el coche camino del punto donde pudiéramos dejarlo para iniciar el ascenso. Tras unos 5-10 minutos de carril, llegamos al mismo llano donde hace 5 años dejamos el coche y procedimos a la descarga de las cosas del maletero. Allí, justo antes de partir, ¡¡¡¡ me eché vaselina !!!! y es que me habían aconsejado que para evitar las ampollas, nada mejor que ponerse vaselina. Jose también se embadurnó los pies y durante todo el trayecto, las bromas fueron constantes (eso sí, ni una ampolla y eso que las botas eran nuevas).

Partimos con media hora de retraso sobre el horario previsto por la organización pero contentos, sobre todo también porque la vez anterior tardamos 3 horas y media en la subida por lo que hacer cumbre a las 13:00 seguía siendo factible.

Yo empecé pronto a sudar como si no costara. De hecho era increíble ver como mi gorra "sudaba". Parecía que tuviera vida propia y que de ella manara el agua sin dificultad alguna. Yo iba reponiendo el líquido con el también llamado agua verde del Mercadona y de paso rebajando el peso de mi mochila. Y hablando de mochilas, éste fue el momento en que las mochilas de niños chicos que llevaban dos de los tres restantes sufrieron algún percance ... ¡¡habráse visto!! y yo tan ufano con mi mega-mochila de 14 euros del Decathlon que tiene hasta para ponerle los bastones :-D.

Proseguimos la subida bebiendo y comiendo frutos secos regularmente. Hicimos una parada un poquito más larga después de un trozo especialmente durillo en la que comimos algo más. El resto lo hicimos bastante bien aunque yo al final llegué cansadillo la verdad. Aunque lo que más me cansó fue ver a dos (creo que padre e hijo) subir tirando de ¡¡DOS BICICLETAS!!. Bueno, en realidad cada uno tiraba de la suya pero eso no quita que cada bici pesara unos 20 kilos según nos comentaron.

Llegué a la cima con una sensible diferencia con respecto a hace 5 años, estaba mucho menos cansado, había pasado mucho menos miedo y quitando que hacía bastante viento y frío y yo no llevaba chubasquero como mis compañeros, por lo demás estaba muy bien. Nos refugiamos en un nevero que nos protegiera del frío y allí procedimos a zamparnos un par de bocatas ... o lo que cada uno pillase :-), con vistas a recuperar fuerzas. El frío me entumeció los músculos y tuve que empezar a estirar los músculos de las piernas sabedor ya que como hace 5 años, tampoco esta vez subiría al "cipotín" tal como lo llamaba Jesús y que marca el vértice geodésico de no sé qué.

Bueno, creo que es hora de ir dejándolo por ahora. Otro día seguiremos con el relato ;-).

Un saludo, Domingo.

No hay comentarios: