Hace diez años - Miguel Ángel Blanco

Bueno, empiezo ahora esta entrada que probablemente debería hacer acabado hace mucho tiempo, en julio para ser más exactos. Sin embargo, nunca es tarde si la dicha llega, aunque en este caso pueda parecer un poco contradictorio hablar de dichas.

El caso es que hablamos de Miguel Ángel Blanco Garrido, ése al que otros recuerdan simplemente como "el concejal del PP" pero que yo al menos quiero recordar por su nombre.

Que su muerte conmocionó a España no se le escapa a nadie. Que su muerte me conmocionó a mí, tampoco se le escapará al que lleve un tiempo leyendo el blog. Para muestra, dos botones:

http://donmingo2005-2006.blogspot.com/2006/03/una-tregua.html#links
http://donmingo2005-2006.blogspot.com/2006/03/mabgbas.html#links

Pero hasta ahora no había contado cómo lo viví yo personalmente que para lo que yo tengo costumbre fue de forma bastante intensa. La verdad es que no quiero ni pensar cómo lo vivirían familiares y amigos.

Nos situamos (aprovecho la wikipedia para refrescar las fechas exactas) en un 10 de julio de 1997. No recuerdo mucho de ese jueves, ni de cómo conocí la noticia ni de lo que pensé. Imagino que pensaría que los asesinos etarras debían estar realmente locos si realmente cumplían su amenaza pues era obvio que sus peticiones eran irrealizables. Tampoco recuerdo nada del viernes 11 de julio salvo que me imagino que deseaba con todas mis fuerzas que una patrulla en misión rutinaria lo descubriera y rescatase.

Y llegó el fatídico sábado. Aquel sábado fui a jugar al fútbol, como todos los sábados. Por aquel entonces empezábamos a jugar a las 11 o 12 y acabábamos a la 1, 2 o incluso 3 de la tarde dependiendo del día y de la gente. Recuerdo que estuve pensando durante el partido sobre el tema, esperando igualmente que al volver a casa en los televisores se pudiera ver la feliz noticia de la liberación. Desgraciadamente no pasó.

Llegaron las 4 de la tarde, la hora fatídica. El silencio en un principio daba por un lado margen a la esperanza, ausencia de noticias, buena noticia, por otro no hacía sino más terrible la espera por la incertidumbre. Oficialmente, unos 50 minutos después del plazo, le dispararon. No recuerdo cuándo se difundió la noticia pero imagino que sobre las 5 y algo ya se supo que habían encontrado el cuerpo de una persona que podría corresponderse con la descripción de Miguel Ángel. Tras los lógicos momentos de confusión, llegó la esperanzadora noticia de que todavía estaba vivo, en estado crítico pero vivo.

Yo personalmente me llené de esperanza de que en contra de todo pronóstico todavía pudiera vengarse de sus asesinos aferrándose a la vida con mayor fuerza que aquélla con la que las balas intentaban arrebatársela. Sin embargo la esperanza no duró mucho. Como en tantos y tantos casos, el fatal desenlace era sólo cuestión de tiempo y más bien poco que mucho. Me acosté desesperanzado y me levanté ya con la noticia de su muerte.

Pocas veces he sentido más impotencia y pocas veces me he sentido más cobarde. Yo debía haber estado allí entre la gente que se manifestaba por toda España, aquéllos que estaban dando a Miguel Ángel el mejor último homenaje que se le podía dar. Aquéllos que vencieron no sólo a los etarras sino también a los políticos. En las memorias de Mayor Oreja, si no me equivoco, él cuenta cómo Arzallus le dijo a él o quizás a Iturgáiz que en aquel momento estaban en la cresta de la ola y todos juntos pero que después cada uno por su lado. También quiero recordar a algún sacerdote o incluso a algún obispo vascos actuando de cara a la galería para uno o dos años después negar la celebración de una misa a la familia arguyendo que no todas las ovejas son iguales. Aunque sinceramente, no recuerdo si fue con la familia de Miguel Ángel Blanco o la de alguna otra víctima de ETA.

Como decía, yo me limité a quedarme pegado en la tele, a cambiar de canal comprobando que todos tenían un lazo negro en honor a la persona que tan horriblemente había sido asesinada. Fui recogiendo en mi mente todos esos detalles con la intención de que jamás se me olvidara aquello que estaba viendo y viviendo. Unos días después, mientras todo estaba fresco en mi cabeza, procedí a hacer mi pequeño homenaje personal con las herramientas que tenía a mano. Con algunos conocimientos básicos en matemáticas e informática hice un programita cuyo código fuente es el que aparece en enlace que puse al principio:
http://donmingo2005-2006.blogspot.com/2006/03/mabgbas.html#links

Guardo todavía el ejecutable que sale al compilar y "linkar" el programa y en ocasiones como ésta lo arranco y veo a toda página diferentes lazos hechos el primero con texto, otros a base de líneas y un último con una función matemática. Pero sin duda lo que más me emociona son los gritos de dolor que la gente de bien (y me imagino que algún que otro político) no podía reprimirse en las manifestaciones y que yo me limité simplemente a transcribir:

' ETA-HB LA MISMA COSA ES
' ASESINOS
' HIJOS DE PUTA
' HB ASESINOS
' EL PUEBLO UNIDO JAMAS SERA VENCIDO
' AQUI ESTAMOS NOSOTROS NO MATAMOS
' MIRA MIS MANOS NO TIENEN SANGRE
' MIRAD AL CIELO NOS ESTA MIRANDO
' ETA NO VASCOS SI
' NO SON VASCOS SON ASESINOS
' ETA AQUI TIENES MI NUCA
' MIGUEL ANGEL SOMOS TODOS
' HB LO TIENES QUE PAGAR
' MIGUEL ANGEL, MIGUEL ANGEL, MIGUEL ANGEL
' ETA PENA DE MUERTE
' QUE CUMPLAN LA PENA
' DONDE ESTAN, NO SE VEN, LOS VOTANTES DE HB
' SIN PISTOLA NO SON NADA
' ETA KAMPORA (ETA FUERA)
' HB KAMPORA (HB FUERA)
' NO HAY COJONES SIN PISTOLAS
' ---- SILENCIOS SEPULCRALES ----
' ---- APLAUSOS ATRONADORES ----

Sin duda, el que más me sobrecogía era el de "ETA, aquí tienes mi nuca". Después de la "lógica" alegría inicial de los hijos de puta que piden champán cuando siegan la vida de alguien que no piensa como ellos, imagino que nunca habrán estado tan acojonados como cuando vieron la ola que se les venía encima y de la que se ponían a salvo hasta los que los disculpaban con hasta cariñosas palabras ... los chicos de la gasolina, no te ... en fin.

Ya casi para acabar, recuerdo que unos días después emitieron un especial donde si mal no recuerdo, tocó Póker y yo, que nunca había aplaudido en un concierto, sólo en la terraza de mi casa, a la 1 de la mañana, me levanté de la silla y entre lágrimas aplaudí.

Todavía hoy, 10 años después, este asunto me afecta mucho. Me afecta sobremanera que alguien haga referencia a Miguel Ángel como "el concejal del PP", despersonalizando de esa forma algo que, al menos a mí, me afectó tanto. De igual forma me repugna cómo según el viento que sople, se trata mejor o peor a unos u otros. De esa forma, no hay reparos en hacer aparecer como violentos a los familiares de Miguel Ángel cuando increpan a los cobardes asesinos que acabaron con la vida de Miguel Ángel, retorcieron de una forma tan cruel la de sus familiares y hasta nos arrebataron un trocito a los demás. En cambio, para alguien que aporta información para que Miguel Ángel pueda ser secuestrado, que lo secuestra o que le da dos tiros cobardemente (no podía ser de otra forma) en la nuca, para esas personas hay "silencio administrativo".

En fin, creo que mejor será dejarlo aquí. Son diez años ya sin Miguel Ángel y desde aquí va mi, cierto es que con retraso, más sentido homenaje y mi petición a él, donde quiera que esté:

Miguel Ángel, ayúdanos a no olvidarte. Gracias.

Un saludo, Domingo.